Solo me frenaban las consecuencias; el medio existia, la internet, las bitácoras digitales, que dan voz al ciudadano de a pie... pero ya no tengo nada que perder, voy cansado de tanto esperar para no recibir mas nada que el olvido o el rechazo.
Así que aquí voy, luciendo de cabecera una palabra que por mucho tiempo obvie (su connotación de vulgar me hacía rechazarla) pero que identifica como ninguna lo que día a día leemos en los periódicos, escuchamos en la radio o en los viandantes, vemos en la televisión...
Gilipollas.
La mayor producción española es el gilipollas.
No quiero malentendidos. Veamos que dice el árbitro inapelable de los significados de nuestro idioma, el Diccionario de la Lengua Española:
"... gilipollas.
1. adj. vulg. gilí. U. t. c. s. ..."
Y revisando el "calé" gilí
"... gilí.
(Del caló jili, inocente, cándido, der. de jil, fresco).
1. adj. coloq. Tonto, lelo. U. t. c. s. ..."
Claro, si aun quedaran dudas, acudir al recurso del Diccionario Panhispánico de Dudas:
"... gilipollas. ‘Tonto o idiota’: «Nuestro Raúl se ha convertido en un auténtico gilipollas» (Mendizábal Cumpleaños [Esp. 1992]). Esta palabra vulgar, usada solo en España, así como otras voces de la misma familia, como gilí y gilipollez, y el sustituto eufemístico gilipuertas, se escriben siempre con g-..."
Si con tanta aclaración, aun no entiende nada de lo anteriormente, bienvenido: es Usted un gilipollas y de Usted hablaremos en este Blog. Será nuestro protagonista.
Y si aun no entiende de que va la cosa, o no tiene claras las intenciones y alcances de este opinólogo, no sea gilipollas y prosiga con la lectura de esta Bitácora Digital.
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